Otro año más, Payasos Sin Fronteras (PSF) nos convocó, otra vez en 28 de diciembre, otra vez en el Teatro Fígaro de Madrid, para disfrutar de su gala anual de Navidades, sesión de adultos. Yo ya me he convertido en fijo de este evento ya que por un módico precio pasas unas horas estupendas, ves muy buenas actuaciones y te marchas a casa con una sonrisa en la boca. Las galas de PSF tienen un ambiente especial donde es imposible no involucrarte con los voluntarios desde el primer minuto y contagiarte del buen rollo y las sonrisas reinantes. Esta vez, además, era un poco especial, ya que la organizaba mi amigo Davel (www.dondavel.com) junto a Agustín López Meseguer (pianista y miembro de los Ciclones), así que una razón más para acudir.
Arriesgaron, y mucho, en mi opinión los organizadores al elegir al presentador de este año. Ni más ni menos que Pepín Tre y su verborrea. La jugada les salió bien, por suerte, y a la gente le gustó bastante (sorprendentemente, muchos no lo conocían). La única pega que le pongo es que, entre los millones de palabras que componen el cultivado y prolijo discurso de este hombre, a veces se olvidaba de su verdadero cometido: presentar a los artistas y hablar sobre Payasos Sin Fronteras y sus objetivos. Pero bueno, se le perdona porque sus surrealistas disertaciones son tremendamente divertidas por lo absurdo.
Así se presentó más o menos el primer número de la noche, Lola la de la Bola, una pitonisa malabarista de contact con mucha gracia y de la que no he encontrado más información. Su actuación me gustó bastante, graciosa, con tablas y mucho desparpajo para acompañar los malabarismos de contact (correctos pero eficaces) con la bola de adivinación.
El segundo fue Ricky, el profesor de tenis. No es otro que José Luis Redondo, de la Cía Tres Puntos y Aparte, una pequeña compañía ya consolidada en el panorama circense nacional que a mí personalmente me gustan mucho. El de Ricky es un número en el que se notan las tablas que da la calle, se siente muy agusto en el escenario y es muy divertido. Además lo acompaña de una bonita y vistosa rutina de pelotas y raquetas de tenis muy bien ejecutada (con temazos musicales como "Estoy loco por el tenis" de Torrelledo o "Somebody to Love" de Jefferson Airplane). De los que más gustaron de la noche, merecidamente.
Tras él venían Gamba y Ginny, a los que yo llevo viendo desde hace años, cuando actuaban en la desaparecida Plaza de las Artes. Su número de cuentacuentos (Ginny) aderezado con la mímica de Juan Gamba me parece genial, siempre me sacan unas risas y me sorprenden con nuevos cuentos. Espero que sigan tan en forma por muchos años. (vídeo de ejemplo)
Antes del descanso le tocaba el turno a Fuman (foto abajo), también miembro de Ciclones, pero con una larga historia de actuaciones en solitario con su número "Musicólogo". Fuman es un clown muy inocente y tontorrón orgulloso de su carro, lleno de sonidos de percusión y bocinas. Además de conectar inmediatamente con el público, cierra la actuación haciendo malabares con las mazas del bombo y lanzándolas contra la caja (de la batería) para que vayan al ritmo de la música.
Antes del descanso vino el habitual vídeo mostrando algunas de los proyectos realizados por los Payasos. Muy tierno y divertido, ver que un grupo de cientos de niños se ríen a carcajadas y consiguen aislarse de su dura situación vital durante unos instantes es maravilloso y hace ver que la labor de PSF es muy necesaria. Os dejo con el del año pasado para que os hagáis una idea:
Tras el descanso les tocó el turno a EsteOeste, Especialistas del Amor. Un dúo musical que recuperaba viejas canciones de amor (Blue Moon) o se inventaba algunas nuevas (Delete, sobre esos emails que nunca debieron ser escritos) para hacernos reir a carcajadas a toda la sala. Tremenda actuación y me los apunto como artistas a los que quiero volver a ver pronto. Geniales. En este vídeo están bien pero tenéis que verlos en directo.
Luego venía el Oso Félix y su humor animal. Ya lo había visto en Carampa hace tiempo y la palabra que se me viene a la cabeza es "kamikace", porque no se me ocurría otra para definir a este argentino disfrazado de oso que consigue que unos chistes muy malos sobre osos contados a gritos hagan reir al público. Parece mentira pero, tras la sorpresa inicial, logró hacer reir a todos.
Para cerrar esta estupenda gala les tocaba a los Hnos Infoncundibles, ya habituales en las actuaciones circenses de Madrid, con una revisión de su numerazo de diábolos y heavy metal. Da gusto ver actuaciones tan trabajadas y cuidadas, con humor, técnica y seguridad.
Por último decir que eché de menos a Pepe Viyuela (ahora es el presidente de PSF), ya que me encanta como clown y ya daba por echo que iba a actuar este año también. Al menos os dejo con un vídeo suyo al ser nombrado presidente, en el que cuenta un poco qué es PSF y qué hacen.
Con este sabor de boca tan bueno nos fuimos para casa, se pasaron volando las más de dos horas que duró la Gala. Enhorabuena a todos los artistas, voluntarios, organizadores y, sobre todo, a Payasos Sin Fronteras por la labor que hacen. Espero que os haya convencido a los lectores para haceros habituales como yo de esta gala tan especial.
Otra crónica de Tralará.
Entradas populares
-
Fushigi , en japonés: misterio, magia, maravilla. Para la comunidad de malabaristas de contact (malabares con bolas acrílicas), esta palabra...
miércoles, 29 de diciembre de 2010
jueves, 23 de diciembre de 2010
Man on Wire,
James Marsh tuvo a bien en 2008 llevar a la pantalla una historia fascinante, la historia de Philippe Petit, un artista callejero francés que en 1974, junto a unos amigos, decidió cruzar las ahora extintas Torres Gemelas de Nueva York sobre un alambre. Se ha basado en el libro del propio Petit "To reach the clouds" (alcanzar las nubes). Ya antes se había intentado narrar este hecho insólito, como en este precioso corto de animación "El hombre que caminó entre las torres" (basado en el libro homónimo de Mordical Gerstein de 2004), o la película High Wire, de 1984.
Man on Wire está rodada en formato documental, con muchos minutos de imágenes rescatadas de Philippe y sus compañeros de aquellos años, grabadas por ellos mismos. Marsh juega con esas imágenes reales y las entremezcla con testimonios de sus protagonistas en la actualidad y recreaciones de algunas situaciones. Lo hace con buen gusto, jugando con el tiempo y dando saltos de presente a pasado y viceversa para acabar con el gran clímax que es la proeza en sí, cruzar las torres gemelas sobre un alambre. Le da una fuerte emoción y te hace consciente de que aquél paseo en lo alto de las torres fue una verdadera proeza. Mención especial a la banda sonora elegida para el documental, con piezas de Satie, Michael Nyman o Grieg. Todo este trabajo fue premiado con el Óscar al mejor documental de 2008.
Además de mostrarnos el cómo se planificó esta hazaña, la película nos presenta a Philippe, todo un personaje fascinante. Philippe era un artista callejero parisino totalmente autodidacta con una personalidad absorbente. Un hombre tenaz que contagiaba su ilusión por la vida y que conseguía que sus amigos le ayudaran a realizar sus gestas. Antes de cruzar las torres gemelas ya había cruzado la Catedral de Notredame de París y el puente Harbour de Sydney. Lo único que no explican es de dónde sacaban la financiación estos veinteañeros franceses para sus empresas y poder estar ocho meses en Nueva York planificando todo, comprar el material y volar a menudo entre los dos países.
Tras la aventura de Nueva York se hizo muy popular, la multa se limitó a una actuación para todo el mundo en Central Park; luego ha repetido actuaciones por todo el mundo, fue llamado a actuar para presidentes franceses e incluso llegó a trabajar para el circo Ringlin' Bros, aunque no le satisfizo la experiencia. Él parece más un verso suelto, con su particular forma de ser, con su show de calle que sigue practicando y mostrando y con su visión optimista del mundo. No hay más que ver su discurso de agradecimiento cuando la película recibió el Óscar de la Academia, nadie había hecho equilibrios con la estatuilla antes ("gracias a la Academia por creer en la magia" dice antes).
Os dejo también con un vídeo donde se le puede ver en una actuación reciente. Sabe cómo meterse al público en el bolsillo, le da emoción a sus actos y tiene ese punto de humor internacional que siempre gusta. Chapó por este artista (mención especial a sus rudimentarias mazas) que asegura no haberse caído más que una vez del alambre, cuando entrenaba en el circo, y se fracturó algunas costillas. Por eso asegura entrenar cada día.
Espero que podáis verla y disfrutarla tanto como yo.
Otros enlaces de interés:
martes, 21 de diciembre de 2010
Ración de vídeos del mes XI
Ración calentita de vídeos para celebrar las Navidades, el Fin de año y que esta es la entrada número 100 de mi blog, por eso precisamente va algo más cargado de la cuenta (en las comidas de Navidad siempre hay excesos, ya sabéis).
Como siempre, con guinda final, no os la perdáis. Pasen y vean:
1) Morgan Cosquer. Malabarista único que combina el estilo francés con movimientos imposibles con los pies. Medalla de plata en el 29º Festival du Cirque de Demain, eso son palabras mayores. En esta entrevista cuenta que empezó a los 20 a hacer malabares, aún estoy a tiempo, hay esperanza.
2) Los Jackson. Siempre me han gustado mucho los números de bicicleta acrobática, suelen tener una suavidad y fluidez que a veces camufla la tremenda dificultad que entraña hacer algo así. Que sea en un programa de televisión de 1965 también le da un matiz especial.
3) Festival de Wuhan. Ración de circo clásico desde China. Cuatro actuaciones de altísimo nivel. Alambre (oso incluído), trapecio espectacular, acrobacias en una estructura aérea cambiante de lo más curiosa y un trampolín, suficiente para saciar al más hambriento.
4) Seb y Walid, Mouvement Alerte. Estos franceses han llevado los lanzamientos múltiplex de mazas a un escalón superior al que pasará mucho tiempo hasta que alguien pueda llegar. Ver este número en directo deja huella por la dificultad y la belleza que tiene. Yo tuve la suerte de presenciarlo en la EJC de Vitoria en 2009 y siempre es distinto, es improvisación, técnica, fuerza y asombro. Con razón a los niños les encanta que lances alto los malabares, a nosotros también. (aquí tenéis otro vídeo suyo, en la Boudu)
5) Chinlone. Es un deporte tradicional malasio similar al fútbol que requiere muchísima habilidad y una tremenda agilidad, eso sí, los resultados son espectaculares. Me río yo de los malabarismos de Ronaldinho (Si le ponemos una red tendremos el Sepak Takraw).
6) Radoslaw Kozar. Malabarista polaco con un estilo que a mi me encantó nada más verlo. Usa mucho la manipulación de mazas y las tijeras. Si además cuidas un poco la edición y las localizaciones te queda un vídeo tan bueno como este, Corrosion:
7) Fails de Circo. Esta guinda es para que comprobéis que en el circo no todo sale bien, y que siempre se va al límite. La verdad es que lo más sorprendente es la velocidad a la que se recuperan de los trompazos que se han dado. Es un recopilatorio del programa del segundo canal francés, Le Plus Grand Cabaret du Monde.
Espero que os hayan gustado y que paséis unas buenas vacaciones de Navidad y tengáis un feliz año nuevo. ¡Salud!
Como siempre, con guinda final, no os la perdáis. Pasen y vean:
1) Morgan Cosquer. Malabarista único que combina el estilo francés con movimientos imposibles con los pies. Medalla de plata en el 29º Festival du Cirque de Demain, eso son palabras mayores. En esta entrevista cuenta que empezó a los 20 a hacer malabares, aún estoy a tiempo, hay esperanza.
2) Los Jackson. Siempre me han gustado mucho los números de bicicleta acrobática, suelen tener una suavidad y fluidez que a veces camufla la tremenda dificultad que entraña hacer algo así. Que sea en un programa de televisión de 1965 también le da un matiz especial.
3) Festival de Wuhan. Ración de circo clásico desde China. Cuatro actuaciones de altísimo nivel. Alambre (oso incluído), trapecio espectacular, acrobacias en una estructura aérea cambiante de lo más curiosa y un trampolín, suficiente para saciar al más hambriento.
4) Seb y Walid, Mouvement Alerte. Estos franceses han llevado los lanzamientos múltiplex de mazas a un escalón superior al que pasará mucho tiempo hasta que alguien pueda llegar. Ver este número en directo deja huella por la dificultad y la belleza que tiene. Yo tuve la suerte de presenciarlo en la EJC de Vitoria en 2009 y siempre es distinto, es improvisación, técnica, fuerza y asombro. Con razón a los niños les encanta que lances alto los malabares, a nosotros también. (aquí tenéis otro vídeo suyo, en la Boudu)
5) Chinlone. Es un deporte tradicional malasio similar al fútbol que requiere muchísima habilidad y una tremenda agilidad, eso sí, los resultados son espectaculares. Me río yo de los malabarismos de Ronaldinho (Si le ponemos una red tendremos el Sepak Takraw).
6) Radoslaw Kozar. Malabarista polaco con un estilo que a mi me encantó nada más verlo. Usa mucho la manipulación de mazas y las tijeras. Si además cuidas un poco la edición y las localizaciones te queda un vídeo tan bueno como este, Corrosion:
7) Fails de Circo. Esta guinda es para que comprobéis que en el circo no todo sale bien, y que siempre se va al límite. La verdad es que lo más sorprendente es la velocidad a la que se recuperan de los trompazos que se han dado. Es un recopilatorio del programa del segundo canal francés, Le Plus Grand Cabaret du Monde.
Espero que os hayan gustado y que paséis unas buenas vacaciones de Navidad y tengáis un feliz año nuevo. ¡Salud!
domingo, 19 de diciembre de 2010
Cultura del Diábolo en Malasia
Hace un par de semanas en el Circoforum apareció un artículo interesantísimo sobre la cultura del diábolo en Malasia. Lo había escrito Ollie, un colaborador de diabolo.ca (el mayor foro internacional de diabolistas) y lo ha traducido Wis, el mismo que escribió las magníficas entradas sobre el diábolo en este blog.
Resulta que el diábolo es el malabar rey por aquellos lares y el nivel es altísimo, aunque con sus peculiaridades, claro está. Para ellos es más que un hobbie y se agrupan en "equipos de diabolistas" donde comparten trucos y entrenan complicadas coreografías. Os pongo los primeros párrafos y el enlace donde leerla al completo, además del vídeo que grabó Ollie de sus experiencias en Kuala Lumpur.
Durante dos años viajando por Asia mis diábolos estuvieron la mayor parte del tiempo desmontados al fondo de mi mochila, así que fue un alivio cuando visité recientemene Kuala Lumpur y tuve la suficiente suerte como para encontrarme con un montón de diabolistas Malayos. En dos días conocí tres "equipos de diábolo" diferentes, fui a una sesión de entrenamiento con un altísimo nivel técnico, vi una actuación clásica en un centro comercial, y visité la convertida estudio/oficina del Ya Ping Diabolo Dance para practicar mi "lenguaje corporal". La cantidad y calidad de diabolistas sólo en esta ciudad fue fenomenal y muchos de los trucos me dejaron sin palabras (no todos los días uno ve ejecutar un 53 sol en un primer intento de 4D bajos) pero mucho más interesante que los trucos molones fue la diferente cultura de diábolo de Malasia. Más que una afición y un malabar ellos ven el diábolo como una parte de su herencia China, y ese estilo clásico asiático y las formaciones de los equipos de diábolo dedicadas a actuar vienen directamente de esa cultura.
Como muchos de vosotros he visto muchos vídeos de grupos de diábolo asiáticos de Malasia y Taiwán con actuaciones de equipos sincronizados pero nunca he sabido mucho sobre la cultura que rodea el estilo y técnica de esos equipos. Unos pocos de los diabolistas que conocí están en diabolo.ca y ciertamente conocen, ven y absorven vídeos occidentales pero definitivamente hay una división entre oriente y occidente y es interestante que un objeto común pueda tener tales culturas diferentes. Considerando que hay probablemente tantos o más diabolistas en Taiwán y Malasia que en todo el resto del mundo junto seguramente merece la pena conocer un poco sobre que pasa por allí. Lo que sigue es un resumen de mi visita y algunas de las cosas que aprendí sobre la cultura del diábolo en Malasia.
Fui recibido por Heng Ee y Luke, los co-líderes del Ya Ping Diabolo Dance, y conducido a lo largo de KL (Kuala Lumpur) al área de su práctica matutina de los Domingos, un patio de colegio. Ambos son estudiantes universitarios y llevan practicando diábolo 10 años o más después de empezar la excuela primaria y después uniéndose al equipo Ya Ping. Como ellos casi todos los demás que conocí habían practicado diábolo mucho tiempo, empezaron jovenes y actualemente son estudiantes de instituo o universidad. A pesar de todo me dijeron que el diábolo tenía una breve historia en Malasia y fue traido aquí hace 15 años por el sifu (maestro/profesor) original “Ya Ping” desde Taiwán, del cual la escuela toma su nombre. Ahora, dos de los estudiantes originales de “Ya Ping” son los entrenadores/gerents de los equipos de diábolo Ya Ping/TND, y Soul. Entre los estudiantes chinos el diábolo es enseñado como una actividad extracurricular y una parte de su herencia china. Todos los diabolistas que conocí eran de descendencia china y hablaban mandarín como primer idioma, no había ninguno de los otros grupos étnicos de Malasia, malayos e indios, dado que presumiblemente ellos no tienen ningún enlace cultural con el diábolo y no es enseñado o elegido en los colegios. Ya Ping y los otros equipos continuan con la tradición enseñando diábolo en las escuelas y cuando le pregunté por primera vez cuántos equipos de diábolo de colegio había, en contraposición a equipos porfesionales, sólo en KL me dijo que había cientos, todos con bastantes pupilos. Cuando consideras el entrenamiento de tantos jugadores en un sólo lugar con una fuerte tradición de estricto entrenamiento y actuaciones en equipo no sorpende que haya muchos buenos jugadores en Malasia (...).
Para seguir leyendo...Circoforum (pincha el link). O si prefieres en inglés, aquí está el post original.
Merece mucho la pena, gracias a Wis por traducirlo y permitirme copiar este fragmento aquí.
Resulta que el diábolo es el malabar rey por aquellos lares y el nivel es altísimo, aunque con sus peculiaridades, claro está. Para ellos es más que un hobbie y se agrupan en "equipos de diabolistas" donde comparten trucos y entrenan complicadas coreografías. Os pongo los primeros párrafos y el enlace donde leerla al completo, además del vídeo que grabó Ollie de sus experiencias en Kuala Lumpur.
Durante dos años viajando por Asia mis diábolos estuvieron la mayor parte del tiempo desmontados al fondo de mi mochila, así que fue un alivio cuando visité recientemene Kuala Lumpur y tuve la suficiente suerte como para encontrarme con un montón de diabolistas Malayos. En dos días conocí tres "equipos de diábolo" diferentes, fui a una sesión de entrenamiento con un altísimo nivel técnico, vi una actuación clásica en un centro comercial, y visité la convertida estudio/oficina del Ya Ping Diabolo Dance para practicar mi "lenguaje corporal". La cantidad y calidad de diabolistas sólo en esta ciudad fue fenomenal y muchos de los trucos me dejaron sin palabras (no todos los días uno ve ejecutar un 53 sol en un primer intento de 4D bajos) pero mucho más interesante que los trucos molones fue la diferente cultura de diábolo de Malasia. Más que una afición y un malabar ellos ven el diábolo como una parte de su herencia China, y ese estilo clásico asiático y las formaciones de los equipos de diábolo dedicadas a actuar vienen directamente de esa cultura.
Como muchos de vosotros he visto muchos vídeos de grupos de diábolo asiáticos de Malasia y Taiwán con actuaciones de equipos sincronizados pero nunca he sabido mucho sobre la cultura que rodea el estilo y técnica de esos equipos. Unos pocos de los diabolistas que conocí están en diabolo.ca y ciertamente conocen, ven y absorven vídeos occidentales pero definitivamente hay una división entre oriente y occidente y es interestante que un objeto común pueda tener tales culturas diferentes. Considerando que hay probablemente tantos o más diabolistas en Taiwán y Malasia que en todo el resto del mundo junto seguramente merece la pena conocer un poco sobre que pasa por allí. Lo que sigue es un resumen de mi visita y algunas de las cosas que aprendí sobre la cultura del diábolo en Malasia.
Fui recibido por Heng Ee y Luke, los co-líderes del Ya Ping Diabolo Dance, y conducido a lo largo de KL (Kuala Lumpur) al área de su práctica matutina de los Domingos, un patio de colegio. Ambos son estudiantes universitarios y llevan practicando diábolo 10 años o más después de empezar la excuela primaria y después uniéndose al equipo Ya Ping. Como ellos casi todos los demás que conocí habían practicado diábolo mucho tiempo, empezaron jovenes y actualemente son estudiantes de instituo o universidad. A pesar de todo me dijeron que el diábolo tenía una breve historia en Malasia y fue traido aquí hace 15 años por el sifu (maestro/profesor) original “Ya Ping” desde Taiwán, del cual la escuela toma su nombre. Ahora, dos de los estudiantes originales de “Ya Ping” son los entrenadores/gerents de los equipos de diábolo Ya Ping/TND, y Soul. Entre los estudiantes chinos el diábolo es enseñado como una actividad extracurricular y una parte de su herencia china. Todos los diabolistas que conocí eran de descendencia china y hablaban mandarín como primer idioma, no había ninguno de los otros grupos étnicos de Malasia, malayos e indios, dado que presumiblemente ellos no tienen ningún enlace cultural con el diábolo y no es enseñado o elegido en los colegios. Ya Ping y los otros equipos continuan con la tradición enseñando diábolo en las escuelas y cuando le pregunté por primera vez cuántos equipos de diábolo de colegio había, en contraposición a equipos porfesionales, sólo en KL me dijo que había cientos, todos con bastantes pupilos. Cuando consideras el entrenamiento de tantos jugadores en un sólo lugar con una fuerte tradición de estricto entrenamiento y actuaciones en equipo no sorpende que haya muchos buenos jugadores en Malasia (...).
Para seguir leyendo...Circoforum (pincha el link). O si prefieres en inglés, aquí está el post original.
Merece mucho la pena, gracias a Wis por traducirlo y permitirme copiar este fragmento aquí.
miércoles, 8 de diciembre de 2010
Sean McKinney, representante del freestyle
Recuerdo haber visto un vídeo de Sean McKinney hace unos años, cuando aún no tenía mucha idea de malabares y Youtube estaba recién inaugurado. Los comentarios sólo hablaban maravillas de su estilo y decían que era único, que tenía algo especial y cosas así. Mientras veía el vídeo no entendía nada, Sean tenía un estilo más bien feo, muy rápido pero sin hacer nada fuera de lo normal.
Hoy, curioseando por la muy recomendable página Ministry of Manipulation, he topado con otro vídeo suyo y me he dado cuenta de que me equivoqué la anterior vez, el estilo sigue siendo feo y rápido, pero hay algunos trucos de altísimo nivel (5 bolas por la espalda, cómo salva las mazas tras dar voleteretas, etc). Me he puesto a buscar más cosas de él y resulta que ha tenido una biografía digna de ser mencionada.
Sean McKinney nació en 1974 en San Diego, California (EEUU); tras interesarse por varios deportes en su infancia, se topó con los malabares en una época en la que muy poca gente lo hacía. Con 17 años participó en un encuentro de la IJA (Asociación Internacional de Malabaristas) como concursante y quedó en tercer lugar (le penalizaron por actuar en ropa de calle). Al año siguiente ganó el concurso gracias a su rutina de bolas y mazas.
Criado en una época en la que el skate empezaba a pegar muy fuerte, el estilo de Sean refleja un poco la influencia del monopatín. Trucos difíciles y rápidos, un estilo muy poco ortodoxo y (seguramente) autodidacta, dando más importancia al qué que al cómo. De hecho grabó un curioso vídeo con el skater Willy Santos llamado Caught Clean en el que se muestra a ambos realizando trucos de malabares y monopatín alternativamente. La parte de Sean está rodada con el mismo enfoque, el protagonista va sorteando obstáculos urbanos y la cámara le sigue, pero esta vez haciendo malabares. El resultado es el siguiente:
Como veis, hace cosas realmente impresionantes (media ducha con 5 bolas y una lata, flash de 9 bolas, saltos varios y los trucazos de 1:37 y 1:40) pero muy poco limpias, lo que en mi opinión le desluce un poco, aunque en verdad es su forma de hacerlo. No me llama mucho ese freestyle acelerado, pero hay que reconocerle el mérito que merece. Si veis los vídeos de sus actuaciones en distintos espectáculos, entre otros los concursos de la IJA, hace exactamente lo mismo, dando un poco la razón a aquellos que dicen que en EEUU los malabares no los ven como un arte si no más como un deporte. Esta sentencia, como todas las generalizaciones, es falsa, pero ya hablaré otro día de malabaristas americanos más preocupados por las formas. Aquí os enlazo un vídeo hecho por Sean con sus amigos, entre broma y escena algo ridícula hay cosas interesantes:
Sorprendentemente, Sean McKinney se suicidó en 2004, lo que quizá provocó esa oleada de mitificación que conlleva toda muerte prematura. Sus familiares han creado una página web en su memoria y un DVD llamado "Extreme Juggling" con vídeos de Sean. Además, recientemente la WJF ha creado una sección en su concurso llamada "Freestyle Competition", a la que le han puesto el nombre de Sean McKinney y el premio es una figura del mismo Sean. Ahora funciona independientemente de la WJF y celebra un concurso anual. Aquí tenéis al ganador de 2007 y su rutina (muy buena y más limpia de lo que esperaba, por cierto), David Kha:
Me ha parecido bonito el detalle de poner su nombre a una competición de freestyle ya que Sean era un buen exponente de éste. No es mi estilo favorito, pero es bueno "tocar todos los palos" de vez en cuando y reconocer un talento cuando se ve. Hay que abrir miras en todos los aspectos de la vida, que es lo que te da la oportunidad de llevarte agradables sorpresas y aprender cosas nuevas.
Y con esta frase tan de abuelo que me he marcado, os despido hasta la próxima entrada. ¡Saludos!
Hoy, curioseando por la muy recomendable página Ministry of Manipulation, he topado con otro vídeo suyo y me he dado cuenta de que me equivoqué la anterior vez, el estilo sigue siendo feo y rápido, pero hay algunos trucos de altísimo nivel (5 bolas por la espalda, cómo salva las mazas tras dar voleteretas, etc). Me he puesto a buscar más cosas de él y resulta que ha tenido una biografía digna de ser mencionada.
Sean McKinney nació en 1974 en San Diego, California (EEUU); tras interesarse por varios deportes en su infancia, se topó con los malabares en una época en la que muy poca gente lo hacía. Con 17 años participó en un encuentro de la IJA (Asociación Internacional de Malabaristas) como concursante y quedó en tercer lugar (le penalizaron por actuar en ropa de calle). Al año siguiente ganó el concurso gracias a su rutina de bolas y mazas.
Criado en una época en la que el skate empezaba a pegar muy fuerte, el estilo de Sean refleja un poco la influencia del monopatín. Trucos difíciles y rápidos, un estilo muy poco ortodoxo y (seguramente) autodidacta, dando más importancia al qué que al cómo. De hecho grabó un curioso vídeo con el skater Willy Santos llamado Caught Clean en el que se muestra a ambos realizando trucos de malabares y monopatín alternativamente. La parte de Sean está rodada con el mismo enfoque, el protagonista va sorteando obstáculos urbanos y la cámara le sigue, pero esta vez haciendo malabares. El resultado es el siguiente:
Como veis, hace cosas realmente impresionantes (media ducha con 5 bolas y una lata, flash de 9 bolas, saltos varios y los trucazos de 1:37 y 1:40) pero muy poco limpias, lo que en mi opinión le desluce un poco, aunque en verdad es su forma de hacerlo. No me llama mucho ese freestyle acelerado, pero hay que reconocerle el mérito que merece. Si veis los vídeos de sus actuaciones en distintos espectáculos, entre otros los concursos de la IJA, hace exactamente lo mismo, dando un poco la razón a aquellos que dicen que en EEUU los malabares no los ven como un arte si no más como un deporte. Esta sentencia, como todas las generalizaciones, es falsa, pero ya hablaré otro día de malabaristas americanos más preocupados por las formas. Aquí os enlazo un vídeo hecho por Sean con sus amigos, entre broma y escena algo ridícula hay cosas interesantes:
Sorprendentemente, Sean McKinney se suicidó en 2004, lo que quizá provocó esa oleada de mitificación que conlleva toda muerte prematura. Sus familiares han creado una página web en su memoria y un DVD llamado "Extreme Juggling" con vídeos de Sean. Además, recientemente la WJF ha creado una sección en su concurso llamada "Freestyle Competition", a la que le han puesto el nombre de Sean McKinney y el premio es una figura del mismo Sean. Ahora funciona independientemente de la WJF y celebra un concurso anual. Aquí tenéis al ganador de 2007 y su rutina (muy buena y más limpia de lo que esperaba, por cierto), David Kha:
Me ha parecido bonito el detalle de poner su nombre a una competición de freestyle ya que Sean era un buen exponente de éste. No es mi estilo favorito, pero es bueno "tocar todos los palos" de vez en cuando y reconocer un talento cuando se ve. Hay que abrir miras en todos los aspectos de la vida, que es lo que te da la oportunidad de llevarte agradables sorpresas y aprender cosas nuevas.
Y con esta frase tan de abuelo que me he marcado, os despido hasta la próxima entrada. ¡Saludos!
Etiquetas:
biografías,
Historia,
Malabares
lunes, 6 de diciembre de 2010
Navidad en el Price
Vuelve al Price por Navidad, y parece que vuelve en forma de circo clásico. El Teatro Circo ha reunido 11 números de artistas consolidados en las mejores carpas. En el elenco hay varias medallas en el Festival de Circo de Montecarlo y el de Cirque de Demain, redondeado con la presencia de los Hermanos Álvarez, recientemente galardonados con el Premio Nacional de Circo 2010.
Un náufrago que llega a una playa con su barca, entonces empieza a dibujar con la arena sus sueños y añoranza sobre un circo en el que se sucedían números espectaculares. Éste es el hilo argumental que enlaza este conglomerado de espectáculos de circo clásico, dirigida por el mítico payaso David Larible y puesto en escena por el ilustre Alessandro Serena. La verdad es que el grupo de artistas es muy bueno, pero en algún momento se tiene la impresión de que se le ha intentado dar un nexo de forma algo improvisada, acentuado por la ausencia de un presentador-conductor que introduzca a los artistas, a los que no nombran en ningún momento. Lo único parecido es el clown César Dias que hace varias apariciones entre actuaciones.
Tras una presentación de los artistas de corte muy clásico, la orquesta de Germán Díaz Guerrero (fantástica toda la noche, da gusto ver espectáculos con música en vivo) da entrada a la primera actuación de la noche. A partir de aquí los números se suceden uno tras otro sin descanso, con un nivel medio altísimo, pero del que tengo que destacar los siguientes:
Felipe Mejías. Este dibujante gaditano se ha especializado en el vistoso y agradecido arte con arena, él es el náufrago que llega a esta isla y nos introduce a su circo. Deja con la boca abierta la facilidad con la que aparecen las imágenes que él quiere de entre la arena, cautivador e hipnótico.
Troupe Puzanovi. Ganadores del Clown de Oro en la 28ª edición del Festival de Montecarlo. Aunque no son los mismos artistas que ganaron aquel prestigioso galardón, las dos actuaciones que hacen, la de columpio y, sobre todo, la de báscula son muy espectaculares. El número de báscula que cierra el espectáculo te mantiene en vilo, mientras ellos ejecutan vuelos tremendos llenos de mortales para caer en una torre humana de tres alturas, ver piruetas sobre zancos o caer sobre una silla a 5 metros tras dos mortales, impresionante. Os dejo con un vídeo de una de sus actuaciones en Montecarlo.
Hermanos Álvarez. Ya hablé de ellos y su número en otra entrada (ahí podéis ver su vídeo), pero su actuación es realmente sensacional. Con una puesta en escena muy cañí, traje de torero y pasodobles, así como unas tablas que les ha dado una vida en el circo, le dan a su número mucha emoción y arranca largas y merecidas ovaciones.
Leo Jackson. Este polifacético artista italiano nos presenta su número de equilibrios en escalera libre. A ritmo de swing, aspecto de dandy y actitud fardona, Leo presenta una actuación medida al milímetro y con una seguridad aplastante. Grandísimo final del número con aros y antorchas en lo alto de la escalera.
César Dias. Joven clown portugués de familia circense y que ya ha actuado en circos tan importantes como el Krone o el Richard Bros. Muy gestual, interactuando mucho con el público y conectando con él, es el personaje que sirve muchas veces de nexo y para dar aire entre actuaciones. Pese a que me parece un buen clown, no me ha gustado que las rutinas que hace sean de otros clowns míticos, como la de la armónica y sombrero de George Carl o el del farwest de Jesko (Saltimbanco). Eso sí, el número en que hace de crooner con my way y el de tocar una canción con una sierra me han parecido muy buenos.
Peres Brothers. La mayor ovación de la noche y con razón. Espectacular mano a mano que hacen esta pareja de hermanos. Una verdadera exhibición de fuerza y elegancia a partes iguales. Todo son movimientos suaves y fluidos mientras ejecutan proezas inverosímiles. Quizá el portor, Adans, sea más conocido en el mundillo rosa por haber estado casado con Estefanía de Mónaco, pero en el mundo del circo son un referente en lo que a esta disciplina se refiere, y su colección de premios así lo atestigua. Sólo por ellos merece la pena la entrada (enlace al vídeo, aunque yo iría sin ver nada, mejor la sorpresa)
El resto de actuaciones de la noche no desmerecen en absoluto, lo único que estas que he mencionado, a mi entender, están a un nivel al que poca gente puede llegar. La troupe de contorsionistas Mundhai quizá estuvieron algo nerviosas en el pase que yo vi, pero el número es muy bueno. Se me hicieron demasiado cortos las actuaciones de trapecio (Bianca Montico) y la de hula hop (Úrsula Naike), aunque ambas ofrecen momentos muy vistosos. Algo decepcionado salí con Jacobo Espina, un bailarín que me impresionó cuando lo vi este verano en ¿Pasión sin Puñales? en el Price. Su número de danza con un caballo no me terminó de convencer en absoluto, no parecían estar cómodos ni él, ni el caballo, ni la bailarina, una pena.
El sabor de boca al salir del Price es excelente, parece que el Teatro Circo ha hecho un gran esfuerzo para traer artistas de renombre y números de altísimo nivel para estas Navidades. Yo que vosotros no me lo perdería, para toda la familia y estarán sólo hasta el 9 de enero.
Toda la información de pases y precios aquí.
Espero que lo disfrutéis tanto como yo. Os dejo con otras críticas del espectáculo:
Un náufrago que llega a una playa con su barca, entonces empieza a dibujar con la arena sus sueños y añoranza sobre un circo en el que se sucedían números espectaculares. Éste es el hilo argumental que enlaza este conglomerado de espectáculos de circo clásico, dirigida por el mítico payaso David Larible y puesto en escena por el ilustre Alessandro Serena. La verdad es que el grupo de artistas es muy bueno, pero en algún momento se tiene la impresión de que se le ha intentado dar un nexo de forma algo improvisada, acentuado por la ausencia de un presentador-conductor que introduzca a los artistas, a los que no nombran en ningún momento. Lo único parecido es el clown César Dias que hace varias apariciones entre actuaciones.
Tras una presentación de los artistas de corte muy clásico, la orquesta de Germán Díaz Guerrero (fantástica toda la noche, da gusto ver espectáculos con música en vivo) da entrada a la primera actuación de la noche. A partir de aquí los números se suceden uno tras otro sin descanso, con un nivel medio altísimo, pero del que tengo que destacar los siguientes:
Felipe Mejías. Este dibujante gaditano se ha especializado en el vistoso y agradecido arte con arena, él es el náufrago que llega a esta isla y nos introduce a su circo. Deja con la boca abierta la facilidad con la que aparecen las imágenes que él quiere de entre la arena, cautivador e hipnótico.
Hermanos Álvarez. Ya hablé de ellos y su número en otra entrada (ahí podéis ver su vídeo), pero su actuación es realmente sensacional. Con una puesta en escena muy cañí, traje de torero y pasodobles, así como unas tablas que les ha dado una vida en el circo, le dan a su número mucha emoción y arranca largas y merecidas ovaciones.
Leo Jackson. Este polifacético artista italiano nos presenta su número de equilibrios en escalera libre. A ritmo de swing, aspecto de dandy y actitud fardona, Leo presenta una actuación medida al milímetro y con una seguridad aplastante. Grandísimo final del número con aros y antorchas en lo alto de la escalera.
César Dias. Joven clown portugués de familia circense y que ya ha actuado en circos tan importantes como el Krone o el Richard Bros. Muy gestual, interactuando mucho con el público y conectando con él, es el personaje que sirve muchas veces de nexo y para dar aire entre actuaciones. Pese a que me parece un buen clown, no me ha gustado que las rutinas que hace sean de otros clowns míticos, como la de la armónica y sombrero de George Carl o el del farwest de Jesko (Saltimbanco). Eso sí, el número en que hace de crooner con my way y el de tocar una canción con una sierra me han parecido muy buenos.
Peres Brothers. La mayor ovación de la noche y con razón. Espectacular mano a mano que hacen esta pareja de hermanos. Una verdadera exhibición de fuerza y elegancia a partes iguales. Todo son movimientos suaves y fluidos mientras ejecutan proezas inverosímiles. Quizá el portor, Adans, sea más conocido en el mundillo rosa por haber estado casado con Estefanía de Mónaco, pero en el mundo del circo son un referente en lo que a esta disciplina se refiere, y su colección de premios así lo atestigua. Sólo por ellos merece la pena la entrada (enlace al vídeo, aunque yo iría sin ver nada, mejor la sorpresa)
El resto de actuaciones de la noche no desmerecen en absoluto, lo único que estas que he mencionado, a mi entender, están a un nivel al que poca gente puede llegar. La troupe de contorsionistas Mundhai quizá estuvieron algo nerviosas en el pase que yo vi, pero el número es muy bueno. Se me hicieron demasiado cortos las actuaciones de trapecio (Bianca Montico) y la de hula hop (Úrsula Naike), aunque ambas ofrecen momentos muy vistosos. Algo decepcionado salí con Jacobo Espina, un bailarín que me impresionó cuando lo vi este verano en ¿Pasión sin Puñales? en el Price. Su número de danza con un caballo no me terminó de convencer en absoluto, no parecían estar cómodos ni él, ni el caballo, ni la bailarina, una pena.
El sabor de boca al salir del Price es excelente, parece que el Teatro Circo ha hecho un gran esfuerzo para traer artistas de renombre y números de altísimo nivel para estas Navidades. Yo que vosotros no me lo perdería, para toda la familia y estarán sólo hasta el 9 de enero.
Toda la información de pases y precios aquí.
Espero que lo disfrutéis tanto como yo. Os dejo con otras críticas del espectáculo:
miércoles, 1 de diciembre de 2010
Entrada de los gladiadores y más música circense
Si hay algo a lo que todo malabarista, a su pesar, se ha terminado acostumbrando, es a escuchar la cantinela de "tito-titorirorito-tito...." mientras uno hace malabares. Es así y hay que asumirlo, si estás practicando o haciendo una pequeña muestra informal ante un grupo de gente, siempre habrá alguien que la entone con una sonrisa en la cara. Así de originales somos los humanos. A mí ya casi me sorprende si no lo oigo.
El caso es que en un ataque de curiosidad de los míos he decidido buscar el nombre original de este tema universalmente asociado al circo. Tras un par de pruebas y gracias al omnipresente Google (a veces da hasta miedo) y a Wikipedia he descubierto que no es si no una marcha militar, La Entrada de los Gladiadores, de Julius Fučík, un compositor Checo de finales del siglo XIX y principios del XX.
Superada la sorpresa inicial todo tiene cierta lógica. Si se escucha con calma e intentando eliminar de la mente las carpas de circo, la obra tiene claro corte militar. Supongo que a alguien a principios del siglo XX le debió parecer gracioso introducir las entradas de payaso en los circos con música militar, y más con esta llamada "la Entrada de los Gladiadores".
Resulta que Fučík (1872 - 1916) dedicó su vida a componer y dirigir marchas militares, dejándonos una fecunda herencia de más de 300 obras. Dado su interés por la Antigua Roma, Fučík escribió esta obra rememorando a los gladiadores entrando en el coliseo a dar su vida. Esperemos que no sepa que los gladiadores a los que da entrada llevan ropas anchas, mucho maquillaje y una nariz roja. Eso sí, también se dejan la piel por el espectáculo, dignos sucesores.
Algo parecido pasa con la Danza del Sable de Aram Khachaturian (1903 - 1978), todo el mundo la reconoce al instante, la sabe tararear y la asociará inmediatamente a momentos de tensión con objetos en equilibrio inestable. Originalmente escrita para representar una danza típica armenia en el ballet Gayaneh, ha pasado al imaginario colectivo como banda sonora de equilibrismos con platos, monociclos o momentos de gran agitación.
Bueno, al menos ahora sabemos ponerle nombre y cara a estas mundialmente conocidas melodías. Yo no puedo resistir la tentación de dejaros con otra melodía de circo, pero de un circo muy especial, espero que os guste:
El caso es que en un ataque de curiosidad de los míos he decidido buscar el nombre original de este tema universalmente asociado al circo. Tras un par de pruebas y gracias al omnipresente Google (a veces da hasta miedo) y a Wikipedia he descubierto que no es si no una marcha militar, La Entrada de los Gladiadores, de Julius Fučík, un compositor Checo de finales del siglo XIX y principios del XX.
Superada la sorpresa inicial todo tiene cierta lógica. Si se escucha con calma e intentando eliminar de la mente las carpas de circo, la obra tiene claro corte militar. Supongo que a alguien a principios del siglo XX le debió parecer gracioso introducir las entradas de payaso en los circos con música militar, y más con esta llamada "la Entrada de los Gladiadores".
Resulta que Fučík (1872 - 1916) dedicó su vida a componer y dirigir marchas militares, dejándonos una fecunda herencia de más de 300 obras. Dado su interés por la Antigua Roma, Fučík escribió esta obra rememorando a los gladiadores entrando en el coliseo a dar su vida. Esperemos que no sepa que los gladiadores a los que da entrada llevan ropas anchas, mucho maquillaje y una nariz roja. Eso sí, también se dejan la piel por el espectáculo, dignos sucesores.
Algo parecido pasa con la Danza del Sable de Aram Khachaturian (1903 - 1978), todo el mundo la reconoce al instante, la sabe tararear y la asociará inmediatamente a momentos de tensión con objetos en equilibrio inestable. Originalmente escrita para representar una danza típica armenia en el ballet Gayaneh, ha pasado al imaginario colectivo como banda sonora de equilibrismos con platos, monociclos o momentos de gran agitación.
Bueno, al menos ahora sabemos ponerle nombre y cara a estas mundialmente conocidas melodías. Yo no puedo resistir la tentación de dejaros con otra melodía de circo, pero de un circo muy especial, espero que os guste:
Suscribirse a:
Entradas (Atom)