Abriendo un huequito en un serrano pueblo de Guadarrama confluyen sus habitantes con los circenses que se aproximan en caravana. A pesar de llamarse encuentrillo, empiezan a instalarse las estructuras junto al pilón del pueblo. Para la sorpresa de todas aparece una cancha de volley maza entre los columpios, un mini tramp, mástil chino, pórtico de aéreos con mástil, un domo y una barra con abundante cerveza artesana de una alta graduación.
La gente del pueblo más curiosa y los recién llegados, unos veinte, comparten una noche de electro-swing con alguna maza que vuela y planes para el día siguiente.
Las "encontradas" que ya son unas 60-70 (entre circenses y locales) amanecen bien en el parking para furgos con un sol castigador, bien a la fresca sombra de los árboles del camping y se disponen a entrenar en los talleres de telas, mástil y acrodúo después del desayuno. Toca comer ensalada de garbanzos a precios populares, mientras se siguen preparando nuevos trucos para un renegade que no se logró hacer.
La tarde se va acercando y con ella el cabaret que consigue reunir a más de cien personas. El primero en salir es un mendigo que pide limosna de pelotas para reducirse a la magia de las mismas, él es Tempo un malabarista local. A continuación vienen los Hermanos Venafrente con su depurado número de manipulación de ochos. El siguiente en actuar, el "Jaba" de Circo Imprevisto, sin el cual este encuentro tan circense no podría haber salido adelante. Nos sorprende con un numerazo de rulo y rola bola con la colaboración de una niña. Un pirata se aproxima para dar un espectáculo desde las velas de su trapecio, se llama Guille y viene desde la escuela de circo de Granada. Breve parón en el Cabaret para sortear una deliciosa cesta de productos de la tierra y cuyos beneficios serán (en sus propias palabras) para los "todavía no refugiados". Volvemos al circo con Jaba y Rebe que nos hacen una buena muestra de acrodúo que cierran su número con los tres grandes del circo: "Fuego, altura y riesgo", doble altura donde el ágil hace cariocas de fuego y el portor tres mazas del mismo elemento. Después de ellos aparece un "Koala" muy zen que con sus diábolos, su libro y su muñeco conquista a todo el pueblo. Llegó el turno para Clara a las telas aéreas con un elegante número que deja paso a Isaac Posac de Casicirco que levanta sus poderosas mazas ante la admiración del público. Un gran Cabaret presentado por un increíble Kike de los Jazzling Brothers uno de los mayores organizadores del encuentro.
Aprovechamos este punto para decir que el pueblo entero se ha volcado en el proyecto, incluso los artesanos de la zona, consiguiendo un trabajo espectacular. Por la noche concierto a cargo de los "Matamala Crew" y cerrando la noche a ritmo de cumbia "Oso y Cierva", que solucionan los problemas técnicos a golpe de rap improvisado y reggaeton vegano (que pasará a ser todo un clásico entre los presentes), mientras el licor café parece gotear de la fuente.
Nos despertamos el domingo con un nuevo taller de mástil, calentando para las olimpiadas que incluyen novedosas pruebas con lanzamiento de chancla en trapecio o alcanzar la cima en las telas. Para despedirnos batalla de agua en el pilón tras una preciosa lanzada.
Nuestra conclusión: "Matamalate"
Gracias a Jesús Irimia por prestarse a hacer esta crónica tan molona de un nuevo encuentro tan molón.
Las "encontradas" que ya son unas 60-70 (entre circenses y locales) amanecen bien en el parking para furgos con un sol castigador, bien a la fresca sombra de los árboles del camping y se disponen a entrenar en los talleres de telas, mástil y acrodúo después del desayuno. Toca comer ensalada de garbanzos a precios populares, mientras se siguen preparando nuevos trucos para un renegade que no se logró hacer.
La tarde se va acercando y con ella el cabaret que consigue reunir a más de cien personas. El primero en salir es un mendigo que pide limosna de pelotas para reducirse a la magia de las mismas, él es Tempo un malabarista local. A continuación vienen los Hermanos Venafrente con su depurado número de manipulación de ochos. El siguiente en actuar, el "Jaba" de Circo Imprevisto, sin el cual este encuentro tan circense no podría haber salido adelante. Nos sorprende con un numerazo de rulo y rola bola con la colaboración de una niña. Un pirata se aproxima para dar un espectáculo desde las velas de su trapecio, se llama Guille y viene desde la escuela de circo de Granada. Breve parón en el Cabaret para sortear una deliciosa cesta de productos de la tierra y cuyos beneficios serán (en sus propias palabras) para los "todavía no refugiados". Volvemos al circo con Jaba y Rebe que nos hacen una buena muestra de acrodúo que cierran su número con los tres grandes del circo: "Fuego, altura y riesgo", doble altura donde el ágil hace cariocas de fuego y el portor tres mazas del mismo elemento. Después de ellos aparece un "Koala" muy zen que con sus diábolos, su libro y su muñeco conquista a todo el pueblo. Llegó el turno para Clara a las telas aéreas con un elegante número que deja paso a Isaac Posac de Casicirco que levanta sus poderosas mazas ante la admiración del público. Un gran Cabaret presentado por un increíble Kike de los Jazzling Brothers uno de los mayores organizadores del encuentro.
Hermanos Venafrente y sus aros en ocho. Foto: Irene Soria |
Aprovechamos este punto para decir que el pueblo entero se ha volcado en el proyecto, incluso los artesanos de la zona, consiguiendo un trabajo espectacular. Por la noche concierto a cargo de los "Matamala Crew" y cerrando la noche a ritmo de cumbia "Oso y Cierva", que solucionan los problemas técnicos a golpe de rap improvisado y reggaeton vegano (que pasará a ser todo un clásico entre los presentes), mientras el licor café parece gotear de la fuente.
Nos despertamos el domingo con un nuevo taller de mástil, calentando para las olimpiadas que incluyen novedosas pruebas con lanzamiento de chancla en trapecio o alcanzar la cima en las telas. Para despedirnos batalla de agua en el pilón tras una preciosa lanzada.
Nuestra conclusión: "Matamalate"
Lanzada. Foto: Tania Venafrente |
Gracias a Jesús Irimia por prestarse a hacer esta crónica tan molona de un nuevo encuentro tan molón.
No hay comentarios:
Publicar un comentario