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domingo, 2 de enero de 2011

Que los disfrutes, Óscar.

Como no podría ser de otra forma, Óscar Nebreda (Barcelona, 1945) eligió el día 28 de diciembre de 2010 para decir que "colgaba los lápices", que se jubila. Ese fue el día en el que su última página de "El Profesor Cojonciano" se publicó y habla de eso precisamente, de sus razones para jubilarse y lo que va a hacer después. La noticia se hizo oficial por este vídeo de El Jueves.es con el siguiente pie: Chst! En pie cuando veáis este vídeo. Cagonlaputa ya. Y no lloréis. Nenazas:



Historia viva del humorismo gráfico en España, él fue uno de los fundadores de El Papus o Barrabás, que fueron los pasos previos para llegar a El Jueves (de la que también fue fundador), la única revista satírica que ha sobrevivido por más de 25 años, muy necesaria en cualquier país y algo solitaria en mi opinión. Él llevó a cabo esos proyectos en los últimos años de la Dictadura y los primeros de la Transición, y siguió creyendo en ellos pese a los problemas legales, amenazas -incluso una bomba-, que les acarreaba. Sólo por eso merece el mayor de los respetos.



Desde que tengo conciencia en mi casa El Jueves siempre ha estado presente, con mayor o menor fluencia, pero estaba. Recuerdo que El Profesor Cojonciano era uno de los que más me hacían reir al principio. Los personajes de la sociedad que nos rodea y nuestras características más vulgares y chuscas estaban perfectamente reflejados en sus viñetas. Era imposible no ver a alguien conocido (o a uno mismo) en las viñetas del Cojonciano, donde analizaba alguna tendencia o moda-ahora llamadas "trending topic"-, algún evento importante de turno o simplemente lo que vemos todos en una situación cotidiana (como la playa, la comida de empresa, un camping, etc). Todo retratado con mucha mala leche, frases que se escuchan en la calle y haciéndonos ver lo cutres y absurdos que podemos llegar a ser todos, pero siempre sin herir a nadie ni caer en el insulto fácil.

Si bien últimamente ya no era más que un lector ocasional de sus viñetas, echaré de menos esta visión ácida de la sociedad del Cojonciano, ese profesor barbudo y con gafas con sus enseñanzas, esas "jamonas" tan bien dibujadas, ese español medio del que todos somos parte. Asegura que "no quiere morir en el escenario" y que "prefiere dejar paso a la juventud", ya que "no hay nadie imprescindible", olé por su sinceridad y valiente decisión. Muchas gracias a Óscar por todos estos años de risas y por haber tenido lo que había que tener para apostar siempre por las revistas de humor en tiempos en que era tan dificil. Sus herederos siguen en plena forma y por muchos años.

Que disfrutes estos años como estoy seguro que harás Óscar, parafraseándote: "¡larga vida, amor, salú y euros a capazos!"


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